Los “Puchu Remache”.
Existió a inicios del siglo
XX, en el sector de Malchinguí, por las rutas que unían el norte del Ecuador
con Quito, una banda de forajidos que azolaban la región, se cuenta que eran
liderados por un soldado de apellido Puchu Remache de orígenes indígenas que
había luchado por la causa liberal y que cuando su caudillo fue asesinado
vilmente por los curuchupas conservadores en la capital, prometió vengar su
muerte.
Desde las partes bajas del
río Pisque hasta los páramos del Mojanda, la banda de los “Puchu Remache” se
dedico al asalto de iglesias, haciendas y viajeros, durante más de siete años
nadie logro ni intento detenerlos, por lo complicado del terreno y por las
emboscadas mortales que solían tender a sus perseguidores. Se cuenta que el
botín que tenían escondido en el páramo era cuantioso e inverosímil; abundantes
joyas de oro y plata, finas porcelanas chinas, pianos de cola, copones y cálices,
ropa fina europea, exóticos perfumes, menajes de casa completos, obras de arte,
abundante comida y las acémilas o mulas que las transportaban.
En determinado momento
ocurrió el robo de una custodia de oro finamente adornada con piedras preciosas
de una de las iglesias más importantes de Ibarra, el gobierno decidió castigar
a los sacrílegos ladrones y envió un batallón de trescientos hombres a
perseguir a los bandidos, con la orden de que no regresaran sin exterminarlos.
En unas pocas semanas el
ejército fue aniquilando en desigual batalla a quienes se habían dedicado al
pillaje como forma de venganza y de sustento, Remache con sus últimos hombres,
logro llegar a las cuevas del Fuya Fuya, donde tenían escondido su tesoro,
nadie sabe a ciencia cierta si fue un terremoto o si en un último y desesperado
acto heroico dinamito la cueva con los últimos
sobrevivientes dentro, pero lo cierto es que cuando el ejercito llego no pudo
encontrar la entrada a la misma ya que gran parte de la montaña se había
desprendido sobre ella.
Hay quienes dicen haber
escuchado de sus padres que aún en algún lugar cercano a las lagunas hay una
entrada subterránea inundada y que en épocas de sequias prolongadas se puede
observar el inicio de dicho túnel, existen quienes aún hoy en día, cuando el
tiempo es propicio se aventuran a buscar el gran botín escondido, sin resultado
alguno hasta el momento.
OBSERVACIONES E INFORMACIÓN ADICIONAL:
Dentro de
las divisiones del Patrimonio Cultural Inmaterial, tenemos el ámbito de las Tradiciones y Expresiones
Orales incluido el Idioma como vehículo del Patrimonio Inmaterial.
De la investigación
de la Tradición Oral en las zonas de estudio se desprende que existen los
subámbitos de la Oralidad Primaria con Canciones y Narraciones, así como la
Oralidad Secundaria, con Literatura y Poesía Popular y Literatura Oficial.
En este caso
los “Pucho – Remache”, pertenece al subámbito de la oralidad primaria en el
género Leyenda asociada a personajes locales, se refiere a personajes duales de
carácter heroico y/o al bandolerismo.
FUENTE: Pobladores mayores de Malchinguí.
REGISTRADO POR: “PROCULTUR. 2010.